xinhua
El gobierno de Brasil y representantes del sector privado y la sociedad civil renovaron hoy hasta el 31 de mayo de 2016 el pacto que impide la comercialización de soya producida en áreas desmatadas de la región amazónica.
El pacto, que caducaría el 31 de diciembre de este a?o, es considerado un instrumento fundamental para inhibir el aumento de la devastación de los bosques en la Amazonia.
De acuerdo con el Ministerio de Medio Ambiente, entre 2007 y 2013 fueron identificadas 47.000 hectáreas de soya plantada en el bioma amazónico, violando el acuerdo.
Entre 2013 y 2014 el plantío en áreas no permitidas creció 17.700 hectáreas, un 61 por ciento.
La ministra de Medio Ambiente, Izabella Teixeira, afirmó que hubo presión económica para cultivar áreas interidatas en función del alto precio de la soya.
"Algunos productores resolvieron apostar en el incumplimiento de la ley", subrayó la ministra, quien observó al mismo tiempo que el total plantado irregularmente es poco significativo en el total de la cosecha de soya.
El área plantada de forma irregular corresponde a 4,6 por ciento de la deforestación en los municipios productores y a 0,9 por ciento en el total de la Amazonia brasile?a.
La tasa media de deforestación en los municipios productores cayó 5,1 veces tras la implantación de la moratoria.
La intención del gobierno es que la moratoria de la soya continúe hasta que sea perfeccionado el control a través del Catastro Ambiental Rural, instituido en el nuevo Código Forestal de 2013, que debe ser implantado hasta 2016.