El gobierno noruego quiere verter 1.200 toneladas de residuos radioactivos en una isla del Fiordo de Oslo en contra de la voluntad de la compa?ía que es due?a del lugar de eliminación de desechos, informaron hoy medios locales.
El gobierno pidió el a?o pasado a la compa?ía de manejo de residuos peligrosos NOAH que recibiera los residuos radioactivos en la isla de Langoya, a cerca de 50 kilómetros al suroeste de Oslo, según la edición en línea del diario local VG.
La compa?ía indicó que realizó dos evaluaciones técnicas y las conclusiones fueron que no podría aceptar los sedimentos de las minas de Sove en el distrito de Telemark, los cuales datan de la época de experimentos nucleares ultrasecretos de los a?os de posguerra.
Pero el Ministerio de Comercio, Industria y Pesca quiere seguir adelante con el plan y ahora ha contratado a la Agencia Sueca de Investigación en Defensa de Estocolmo para realizar la evaluación, informó VG.