BEIJING, 30 ago (Xinhua) -- Soldados japoneses de la Segunda Guerra Mundial quemaron vivos a civiles chinos y violaron a un gran número de mujeres durante su invasión de China, de acuerdo con la confesión de un criminal de guerra difundida hoy domingo por la Administración Estatal de Archivos.
Hoichi Matsui y sus compa?eros incendiaron 100 casas en un pueblo en el distrito de Laiwu, en la provincia oriental china de Shandong, en 1941 y quemaron vivos a 50 hombres, mujeres y ni?os, escribió en una confesión de 1954, que forma parte de una serie de documentos de este tipo publicados coincidiendo con la conmemoración por parte de China del 70o aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial.
Matsui, que ocupó un puesto en Shandong desde 1940 hasta ser capturado, en agosto de 1945, torturó brutalmente y enterró vivos a soldados chinos. Confesó que había ordenado a las tropas apu?alar a cinco chinos como parte de ejercicios de entrenamiento de habilidades con la espada.
Violó por lo menos a cinco mujeres chinas y pidió a sus subordinados que violaran en grupo a otras dos mujeres chinas. Además, violó a siete mujeres de la República Popular Democrática de Corea, según su confesión.