Por Victoria Argüello
CARACAS, 23 jul (Xinhua) -- Las recientes amenazas del gobierno del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de sancionar a Venezuela si el país avanza hacia una Constituyente, podrían guardar un rasgo "emocional" más que "objetivo", aseguró el analista Sergio Rodríguez Gelfenstein.
El exdirector de Relaciones Internacionales de la presidencia de Venezuela consideró que las sanciones anunciadas por EEUU, pueden ir desde acciones individuales, como bloqueos de cuentas a ciudadanos venezolanos o a instituciones, hasta suspender compras de crudo a Venezuela.
En cualquier caso, estos "instrumentos de presión", que también pudieran estar relacionados a hacer más difíciles las transacciones comerciales o bancarias, "han sido históricamente inefectivos" incluso para la propia política exterior estadounidense, opinó el internacionalista.
"De darse el supuesto de que EEUU suspenda o recorte la compra de crudo a Venezuela, el país puede colocar el petróleo en otros mercados, mientras que Estados Unidos habría perdido un proveedor seguro, confiable y cercano", apuntó en entrevista con Xinhua.
Para Rodríguez, esta medida de Trump responde a una lógica emocional más que racional, conforme han sido las acciones de la Casa Blanca desde su llegada al poder, no sólo con Venezuela o América Latina, sino también con países como Rusia, la República Popular Democrática de Corea (RPDC) e Irán.
No obstante, destacó como consecuencias el "impacto comunicacional" en el exterior, aunque no desestima las repercusiones negativas de estas sanciones en el ámbito de la economía local y ciudadana, si se aplican al Estado y no sólo a individualidades.
En América Latina, se?aló que muchos países, sobre todo los que mantienen gobiernos conservadores, estarían de acuerdo con la medida de EEUU a razón de intereses económicos y no tantos políticos.
Colocó como ejemplo, que la mayoría de los Estados latinoamericanos durante muchos a?os han rechazado el bloqueo de EEUU contra Cuba y sin embargo, hoy están de acuerdo con establecer sanciones a Venezuela.
"Muchos de esos países se aprovechan de las sanciones de Estados Unidos contra Rusia; sin embargo, naciones como Colombia, Perú o Chile, países gobernados por la derecha, aprovechan esta situación para sustituir mercados que está dejando de abastecer la Unión Europea", comparó el analista.
En referencia a las reacciones que podrían evidenciarse en Europa, consideró Rodríguez Gelfenstein que hoy esta región no figura como un ente políticamente autónomo, sino plegada absolutamente a las posiciones de EEUU en materia de Política Exterior.
Aseguró que pese a las presiones internacionales que hoy se ciernen sobre Venezuela, el presidente Nicolás Maduro ha demostrado a su homólogo Trump que no revertirá la convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente (ANC) cuyas elecciones serán el próximo 30 de julio.
"No veo por qué el presidente Maduro vaya a cambiar de opinión, no pareciera ser ese el tono de las alocuciones que ha tenido y de sus decisiones como convocante de la Constituyente", dijo.
A?adió que para que haya un cambio en su decisión de suspender la iniciativa, tendría que haber una presión interna muy fuerte, "y esa presión interna no la ha habido porque hay un importante sector de la población que quiere participar en la ANC", aclaró.
Sin embargo, resaltó como nuevo problema de la vida política nacional la instauración de la violencia como "método de lucha", que afecta actualmente la capacidad de la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) de sentarse a dialogar con el gobierno.
"La violencia ya se impuso como forma de hacer política, la oposición y Estados Unidos alimentaron a grupos terroristas sobre los cuales hoy ya no tienen control", arguyó.
Además negó que toda la MUD apoye las acciones de calle acometidas, y cuyos resultados mayoritariamente violentos, han provocado la muerte de 102 personas además de generar miles de lesionados.
"Hay sectores que propician la violencia en el país que no pertenecen a la MUD así como hay sectores de la MUD que rechazan a estos grupos terroristas", explicó el internacionalista.
El también investigador ve en el diálogo la principal vía para dirimir la aguda crisis política que enfrenta la nación suramericana, pero aseguró no ver voluntad del lado opositor para querer negociar, en parte afectados por las amenazas o el miedo a ser llamados "traidores" o "débiles".
"Ellos están viviendo en ese marco de violencia, en ese marco de agresión, ya es algo que me parece que es indetenible, la violencia se va a seguir desarrollando porque ya es algo de lo cual no se tiene control; y cuando caes en esa espiral de irracionalidad no puedes volver a la política", defendió.
Por otro lado, dijo tampoco ver la posibilidad de que, por la vía de la violencia y no de los votos, se logre derrocar al gobierno del presidente Maduro, por lo cual consideró que el actual panorama está signado de mucha incertidumbre.