BUENOS AIRES, 5 feb (Xinhua) -- El secretario de Estado norteamericano, Rex Tillerson, estuvo en Argentina durante casi tres días, entre sábado y lunes, y confirmó que el país que lo acogió es un aliado en la retórica de Washington contra Venezuela.
Durante su estancia en Argentina, en una gira que incluye también a México, Perú, Colombia y Jamaica, el jefe de la diplomacia de Donald Trump advirtió que Estados Unidos estudia cómo controlar el financiamiento del gobierno de Nicolás Maduro.
"Sancionar la venta de petróleo (de Venezuela) en Estados Unidos o la refinación de productos de Venezuela es algo que estamos considerando", dijo Tillerson el domingo ante la prensa, luego de una reunión con el ministro de Relaciones Exteriores y Culto de Argentina, Jorge Faurie.
El funcionario estadounidense agregó que con Faurie se habló "en profundidad sobre el tema de Venezuela, entre otras cosas, qué pasos adicionales podrían darse para aumentar la presión sobre el régimen de Maduro a fin de que restablezca la constitución y el proceso constitucional".
"Aplicar sanciones al petróleo o de hecho prohibir que se comercialice en Estados Unidos, o para el caso de Estados Unidos, vender o proporcionar petróleo a Venezuela, u otros productos de refinería, es una medida que seguimos evaluando", enfatizó.
Desde el lado argentino, Faurie dijo que "sin duda, el poder controlar el financiamiento que recibe el actual gobierno (venezolano), sea por vía directa, sea por vías indirectas, es un elemento extremadamente importante que hemos considerado con Rex Tillerson".
Días atrás, durante un viaje a Francia, el presidente de Argentina, Mauricio Macri dijo que su gobierno "no" reconocerá las elecciones presidenciales convocadas para el primer cuatrimestre del a?o por la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) en Venezuela.
Este lunes, Tillerson fue recibido por el presidente Macri, encuentro que, según difundió aquí la Presidencia, se extendió por espacio de 40 minutos.
"Con Venezuela en la mira", consignó el diario local Página/12 al dar cuenta del encuentro, artículo en el que recordó que "en declaraciones recientes, Tillerson sugirió que un golpe de Estado podría ser la salida para la crisis venezolana".
En diálogo con Xinhua, el analista argentino Leandro Morgenfeld explicó que la visita de Tillerson se da en el marco de una "política que busca alinear a los gobiernos derechistas de la región en su predica contra países como Cuba y Venezuela".
El experto e historiador argentino dijo "la predica" de Trump contra Caracas tiene como objetivo final "imponer su voluntad en Venezuela, sin respetar el principio de autodeterminación. La excusa es la defensa de la democracia, pero el objetivo es atacar a gobiernos no alineados con Washington, atacar a quienes pretenden construir una integración regional autónoma o un vínculo exterior más diversificado, que incluya otros países fuera de Occidente".
La sintonía entre Buenos Aires y Washington excede la cuestión de Venezuela. Antes de su viaje por la región, Tillerson elogió las reformas económicas pro-mercado impulsadas por el presidente Macri, y pidió que otros países de la región adopten "un camino similar".
"La Argentina, con Macri como presidente, ha hecho enormes esfuerzos por implementar reformas para abrir la economía de ese país y generar crecimiento. Esperamos que otros países tomen un camino similar para ayudar al hemisferio a crecer en prosperidad", dijo el funcionario estadounidense.
Tras su paso por Argentina, Tillerson partió hacia Perú, desde donde se trasladará a Colombia y Jamaica. Allí concluirá, el 7 de este mes, el viaje iniciado el 1 de febrero en México.
Para el presidente Maduro, esa gira regional tiene por objetivo "conspirar contra la revolución bolivariana, contra el pueblo de Venezuela. Pero el imperialismo (...) ha terminado siendo un tigre de papel, y aquí está una revolución de verdad, pujante", afirmó el sábado pasado.