Países de América avalan compromiso anticorrupción
Jefes de Estado y de Gobierno saludan durante la fotografía oficial de la VIII Cumbre de Las Américas, en Lima, Perú, el 14 de abril de 2018. Los jefes de Estado y de Gobierno, así como los representantes que participan en la VIII Cumbre de las Américas de Lima aprobaron el sábado por aclamación el "Compromiso de Lima" sobre la lucha contra la corrupción en la región. (Xinhua/Norman Córdova/ANDINA)
LIMA, 14 abr (Xinhua) -- La VIII Cumbre de las Américas aprobó hoy sábado el "Compromiso de Lima: Gobernabilidad democrática frente a la corrupción", con el que se busca limitar los escándalos y crisis políticas en la región por relaciones ilegales entre agentes públicos y privados.
El presidente peruano, Martín Vizcarra, expresó que la corrupción sistémica es la nueva amenaza a la gobernabilidad democrática de la región, y que la Cumbre dio una respuesta continental "ante esa lacra".
Vizcarra llamó a identificar y denunciar las diversas modalidades en las que se manifiesta la corrupción, incluyendo sus formas más sutiles, como el tráfico de influencias, los conflictos de intereses y financiación de campa?as electorales.
El mandatario propuso a los líderes de la región "un compromiso similar al planteado al pueblo peruano, de acordar un pacto social, sin hacer distinciones de colores políticos, para enfrentar con convicción y perseverancia la corrupción sistémica".
El texto del Compromiso de Lima incluye acciones para mejorar la transparencia y acceso a la información, participación de la sociedad civil en el seguimiento de la gestión gubernamental, protección de informantes y libertad de expresión, además de educación en valores democráticos.
También sobre el rol del sector privado en la lucha anticorrupción, el financiamiento de los partidos políticos, transparencia en obras públicas y compras gubernamentales, intercambio de información entre las fiscalías, cooperación entre los sectores bancario y judicial, iniciativas de recuperación de activos, medidas contra el cohecho y soborno internacional, entre otros.
El presidente chileno, Sebastián Pi?era, abogó por aplicar "una regla de oro", que debe ser que "el bien común predomine sobre el interés particular, y el interés público sobre el privado", defendiendo un mayor rigor contra los desvíos.
Pi?era pidió reglas del juego claras, parejas y conocidas, y aumentar la transparencia porque "no hay mejor policía que el alumbrado público ni mejor desinfectante que la luz solar".
El mandatario argentino, Mauricio Macri, dijo que la corrupción se incrementa donde la democracia se debilita, y defendió que los bienes públicos lleguen a quienes más lo necesitan, en vez de redes clientelares.
Macri afirmó que la corrupción cruza las fronteras y que su combate debe tener también carácter transnacional, advirtiendo que "son muchos los que quieren evitar las iniciativas que transparenten al Estado por miedo a que afecten sus intereses, son muchos los que todavía apuestan por la impunidad".
También el presidente mexicano, Enrique Pe?a Nieto, dijo que la lucha contra la corrupción debe ser un esfuerzo conjunto.
"Sabemos que los grandes problemas nacionales no podrán ser resueltos sin una intensa cooperación internacional. Debemos trabajar juntos con base en los valores que combatimos para superar los desafíos que enfrentamos", apuntó.
El mandatario peruano, Evo Morales, en cambio, dijo que nada de lo que se diga será suficiente si no se atacan estructuras de la corrupción, quienes la promueven y los mecanismos institucionalizados que son fuente o guarida de dinero corrupto.
Llamó a eliminar los paraísos fiscales, la reforma del sistema financiero y la supresión del secreto bancario "que aprovechan los delincuentes", así como controlar a las empresas transnacionales "que fomentan la corrupción y violación de los derechos humanos".
El canciller cubano, Bruno Rodríguez, advirtió que el combate a la corrupción es también utilizado en varios países para combatir a políticos opositores y a gobiernos populares en la región, y que ha emergido un "partido judicial".
Acusó a la Organización de Estados Americanos (OEA) de actuar para restaurar a escala continental el "neoliberalismo salvaje", utilizando la lucha contra la corrupción como un "arma política".
El presidente peruano, Martín Vizcarra, clausuró la VIII Cumbre de las Américas con un llamado a aplicar los compromisos que permitan una "política de tolerancia cero frente a los actos de corrupción" en la región.