MADRID, 2 jul (Xinhua) -- La unanimidad sobre el fracaso de Espa?a en el Mundial de Rusia ha sido total en la prensa nacional y extranjera, además de la coincidencia de los analistas en resaltar que ya empezó mal el campeonato con la inesperada y sorprendente destitución del seleccionador Julen Lopetegui dos días antes de debut del combinado espa?ol.
La selección espa?ola ha sido una sombra de lo que fue, ha ganado un único partido (y con sufrimiento) de los cuatro jugados y en ningún momento ha dado la razón a los pronósticos que la colocaban como favorita a alzar su segunda Copa del Mundo.
Medios y analistas destacan a los protagonistas del fracaso de Espa?a, en el que el portero David de Egea se lleva gran parte de las críticas, por haber fallado ante Ronaldo, encajado tres goles y no haberse levantado del desastre.
Ante Irán demostró inseguridad, su defensa dejó de confiar en él y ese peso del error ante Portugal acabó por sepultarle en este mundial, haciendo que se marche del campeonato como portero con menos paradas (una, por seis goles encajados) en una Copa del Mundo con al menos tres partidos jugados, desde que se recogen datos oficiales.
El problema de Espa?a al destituir a Julen Lopetegui originó un caso inédito en el Mundial de Rusia, una decisión tomada en caliente por el nuevo presidente de la Federación Espa?ola de Fútbol, Luis Rubiales, que acababa de llegar al organismo futbolístico y que no atendió al deseo de un vestuario que durante dos a?os estuvo preparando esta cita con su entrenador.
Koke, uno de los jugadores que falló un penalti ante Rusia, dijo tras terminar el partido con los rusos: "Se nos fue nuestro líder", en clara referencia a la marcha de Lopetegui, pero pese al desastre de Espa?a el propio Rubiales se?aló: "No me arrepiento de haber destituido a Lopetegui".
Otro de los aspectos que han originado el desastre de Espa?a han sido jugadores claves en baja forma, donde tanto Iniesta, Silva o Carvajal han estado muy discretos y solo Isco ha demostrado que era el que más en forma estaba siendo en los cuatros partidos disputados por La Roja el jugador más destacado.
Una defensa frágil durante el campeonato originó inseguridad en la zaga, donde el poco entendimiento entre los defensores proporcionó huecos fáciles de penetrar por parte de los contrarios y en Rusia ha dado una sensación muy insegura que permitieron goles imperdonables, como el penalti por mano de Piqué en octavos contra los rusos o la falta de entendimiento de Iniesta con Ramos ante Marruecos.
Espa?a dio ante Rusia muchos pases, 1.114 según el diario deportivo Marca, récord histórico de los Mundiales y muy pocos de ellos fueron efectivos de cara al gol, lo que evidenció una falta de profundidad, desborde y mal entendimiento entre los jugadores.
Espa?a careció siempre de un plan B, se?alan hoy medios deportivos, y Fernando Hierro debió apuntalar más cambios, ya que prácticamente no movió el esquema preestablecido por Julen Lopetegui y no hizo variaciones aunque el equipo dio muestras de necesitarlas.
Por último, Fernando Hierro fue criticado por hacer cambios muy tarde y sin agotar los recursos de los jugadores que estaban en el banquillo, la mayoría de los cuales se quedaron sin jugar, resaltan hoy analistas y medios nacionales.