Por Luis Alberto Sierra G.
PANAMA, 3 abr (Xinhua) -- La iniciativa china de la Franja Económica de la Ruta de la Seda y la Ruta Marítima de la Seda del Siglo XXI, con la que se pretende crear una red de comercio e infraestructura que conecte Asia con Europa, Africa y otras zonas del mundo, es una oportunidad para Panamá y Brasil que no se debe dejar pasar, aseguró un experto paname?o en el tema.
"Hay que ir más allá. Esta es una oportunidad, y las oportunidades tienen riesgos, y no por eso se deben dejar", expuso Eddie Tapiero, economista e investigador de la Autoridad del Canal de Panamá (ACP).
El además autor del libro "La Ruta de la Seda y Panamá", que busca arrojar nuevas luces para entender mejor las relaciones China-América Latina, invitó a ver más allá al considerar el tema de la Franja y la Ruta, según expresó esta semana durante la Conferencia "Panamá Brazilian Day", organizada por la Cámara de Inversiones y Comercio Brasil-Panamá.
Ante un auditorio colmado, e integrado por funcionarios y representantes del sector privado de Panamá y Brasil, Tapiero reconoció la iniciativa como una expresión de la supervivencia de las mejores rutas comerciales, y para cuya comprensión hizo un repaso sobre diferentes etapas de la historia de China.
Se?aló como contexto que China en menos de 20 a?os sacó a 400 millones de personas de la pobreza, y aseguró que ese país "representa una oportunidad de cambio", la cual se refleja en parte en el interés que tiene en conectar los mercados a través de zonas económicas especiales.
Pero observó que el enfoque chino no es por altruismo, sino por propiciar las mejores posibilidades en el intercambio comercial con un país que se transformó en la fábrica del mundo y que sigue impulsando importantes transformaciones.
En diálogo con Xinhua luego de la presentación, Tapiero consideró que Panamá y Brasil tienen el potencial, al igual que otros países latinoamericanos, de llevar más productos alimenticios a China, que suplan determinadas necesidades del mercado del país asiático.
Aseguró que hay terrenos en estos dos países que podrían usarse para nuevos cultivos, parte de cuya producción podría exportarse a China, pero cuyas áreas no han podido desarrollarse debido a los altos costos logísticos internos.
"La Franja y la Ruta pueden ayudar a reducir estos costos (logísticos) y abren la posibilidad, por ejemplo, a Panamá de acumular carga fragmentada, y procedente de países vecinos, como Nicaragua, y que se podría enviar luego a China", explicó.
Tapiero remarcó la importancia de esta posibilidad en particular para el desarrollo de áreas en Panamá y en Brasil en donde hay pobreza, falta infraestructura e inversión, y para cuyo desarrollo es necesaria una demanda, presente en el mercado chino, según enfatizó.
El especialista en inteligencia competitiva resumió que Panamá, Brasil y América Latina pueden potenciar las complementariedades que tienen con China para avanzar.
"No se trata de ir de frente, ya que no podemos competir con las economías de escala, pero si podemos competir en nichos, o en productos específicos, dándole valor agregado a la carga, y en lugar de exportar solo pi?a a China, enviar dulces o concentrados de pi?a, o productos con valor", enfatizó.
"Trabajando juntos podemos potenciar las exportaciones de productos agrícolas hacia China, y China puede vendernos también productos. Esa es la sinergia de la Franja y la Ruta, no es por altruismo, sino porque nos ayudamos como amigos, para trabajar con armonía y con un sistema que funciona eficientemente", enfatizó.
Reconoció que se necesita un cambio de mentalidad para entender el tema, puesto que no se trata de una conquista de uno sobre otro, sino de ver esta como una oportunidad de negocio, cuyos riesgos se pueden mitigar.
"El mundo tiene ante así una oportunidad que le está diciendo intégrate, habla sobre tus problemas y genera paz", sostuvo el especialista.
Para aprovechar la iniciativa, Tapiero consideró clave que los ciudadanos en América Latina exijan a sus gobiernos mayor transparencia y que haya instituciones sólidas, para que sea posible una mejor redistribución de la riqueza.
Aseguró que las dudas que pudiese haber sobre lo que depararán las relaciones con China se pueden resolver a través del intercambio educativo y cultural, para un mayor conocimiento entre las partes.
En relación con la celebración este mes en China del II Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional, Tapiero a?adió que es necesario abrir la mente, porque la iniciativa es una oportunidad como ninguna otra.
"Estados Unidos tiene que estar como parte de (la Franja y) la Ruta, es un gran socio comercial, es un aliado y que tiene mucho que ofrecer. No se trata de cambiar uno por otro (Estados Unidos por China), sino de trabajar en colaboración, de potenciar el nuevo siglo XXI y mirar a largo plazo", puntualizó.