WASHINGTON, 29 may (Xinhua) -- El fiscal especial estadounidense Robert Mueller hizo hoy su primera declaración pública acerca de la investigación sobre la supuesta injerencia de Rusia en la elección presidencial estadounidense de 2016.
Mueller dijo que acusar al presidente Donald Trump de un delito "no era una opción que pudiéramos considerar" debido a las directrices del Departamento de Justicia estadounidense.
"El informe es mi testimonio", expresó Mueller en su aparición ante las cámaras, en referencia al informe de 448 páginas de sus investigadores. No aceptó preguntas e indicó que preferiría no testificar públicamente ante el Congreso acerca de su investigación de 22 meses.
Mueller explicó la política de larga data del Departamento de Justicia, que establece que un presidente en funciones no puede ser acusado de un delito.
"Acusar al presidente de un delito no era una opción que pudiéramos considerar", declaró Mueller, y agregó que "sería injusto acusar a alguien de un delito cuando no podría haber una resolución judicial sobre la acusación".
"Si hubiéramos tenido la certeza de que el presidente claramente no cometió un delito, lo habríamos dicho", declaró. "No determinamos si el presidente cometió o no un delito", agregó.
"La Constitución requiere de un proceso adicional al sistema de justicia penal para acusar formalmente al presidente de un acto indebido", se?aló Mueller, haciendo eco de su informe que se?ala que el Congreso "podría aplicar leyes de obstrucción al ejercicio corrupto de los poderes del cargo por parte del presidente de acuerdo con nuestro sistema constitucional de revisiones y balances y con el principio de que ninguna persona está por encima de la ley".
"Concluimos que no llegaríamos a una determinación de una u otra manera acerca de si el presidente cometió o no un delito", a?adió Mueller. "Esa es la posición final de la oficina".