YINCHUAN, 5 sep (Xinhua) -- La cuarta Expo China-Estados Arabes fue inaugurada hoy en Yinchuan, capital de la región autónoma hui de Ningxia, con énfasis en la cooperación económica, comercial, científica y tecnológica.
El evento de cuatro días incluirá ferias comerciales y foros sobre infraestructura, atención médica por internet plus, alta tecnología, agricultura moderna, logística, turismo, economía digital y cooperación industrial. Se espera que atraiga a unos 12.600 participantes de 2.900 organizaciones regionales, cámaras de comercio, asociaciones y empresas de 89 países.
Cao Jianming, vicepresidente del Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional, dijo en la ceremonia de inauguración que se han alcanzado logros en la cooperación chino-árabe en los ámbitos de infraestructura, energía, economía y parques comerciales, alta tecnología y finanzas.
Cao pidió esfuerzos conjuntos de ambas partes para impulsar la Iniciativa de la Franja y la Ruta y hacer que la cooperación bilateral beneficie a más personas.
Además de enfatizar la larga historia de amistad y cooperación chino-árabe, Boydiel Houmeid, vicepresidente de la Asamblea Nacional de Mauritania, dijo que con el firme crecimiento de la fortaleza económica, científica y tecnológica de ambas partes, existe enorme potencial para la cooperación bilateral en diversos ámbitos.
La exposición es patrocinada por el Ministerio de Comercio, el Consejo de China para la Promoción del Comercio Internacional y el gobierno regional de Ningxia.
Inaugurado en 2013, el evento bienal se ha convertido en una importante plataforma para que China y los países árabes impulsen juntos la Iniciativa de la Franja y la Ruta.
La cooperación económica y comercial chino-árabe ha adquirido fuerza en los últimos a?os. El a?o pasado, el volumen del comercio entre las dos partes ascendió a 244.300 millones de dólares, lo que representó un incremento de 58 por ciento.
En 2018, las empresas chinas firmaron contratos de nuevos proyectos por 35.600 millones de dólares en los países árabes, un incremento de nueve por ciento, y la inversión directa de empresas chinas en los países árabes se ubicó en 1.200 millones de dólares e involucró sectores como energía, infraestructura y manufactura.