Masiva manifestación de docentes en Argentina en reclamo de discusión nacional de salarios

Actualizado a las 23/03/2017 - 13:14

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BUENOS AIRES, 22 mar (Xinhua) -- Docentes llegados de todo el país participaron hoy en esta capital en una masiva movilización para reclamar al gobierno del presidente Mauricio Macri el llamado a una negociación salarial de alcance nacional, postura que la administración central rechaza al considerar que los acuerdos deben ser celebrados por las provincias.

La movilización, denominada "Marcha Federal Educativa", concluyó en la emblemática Plaza de Mayo, frente a la sede del Ejecutivo, y contó con la participación de trabajadores de la educación, estudiantes universitarios, científicos, padres y alumnos, bajo el lema "sin paritaria nacional, hay conflicto nacional".

El secretario general del Sindicato Unico de Trabajadores de la Educación de la provincia de Buenos Aires (SUTEBA), Roberto Baradel, expresó: "Somos muchísimos los docentes y las familias en esta gran marcha federal educativa. Estamos todos unidos reclamando un salario digno, un trato respetuoso y mayor inversión en la educación".

De la marcha participaron dirigentes de los cinco gremios docentes nacionales, junto con otros de carácter provincial, como el SUTEBA.

Como contrapartida, el gobierno argentino ratificó que no convocará a los docentes a una discusión paritaria federal para definir salarios.

El jefe del Gabinete de Ministros, Marcos Pe?a, enfatizó que la negociación salarial de los docentes "debe hacerse con los empleadores directos, que son las provincias".

Pe?a a?adió que en las negociaciones entre gremios docentes y administraciones provinciales se puede "decidir un 0 por ciento de aumento, como hizo Santa Cruz o el 30 o 40 por ciento, como hicieron otros. Eso es fortalecer el federalismo".

Por su parte, el ministro de Educación de la Nación, Esteban Bullrich, insistió en que el gobierno nacional no va a convocar a la paritaria federal, porque la administración federal "no paga salarios" de los maestros.

El gobierno argentino justifica su postura en una ley según la cual los docentes argentinos deben percibir un 20 por ciento más que el salario mínimo, vital y móvil (8.060 pesos, equivalente a 503 dólares), que se actualiza de manera semestral, y en que los empleadores directos son las provincias.