LA HABANA, 1 dic (Xinhua) -- Mientras el Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (Sida) sigue expandiéndose por el mundo, Cuba mantiene hoy una fuerte batalla contra esa enfermedad, y no escatima esfuerzos ni recursos en el tratamiento a los infectados.
El Día Mundial de Lucha contra el VIH/Sida, que se celebra cada 1 de diciembre, incluyó en la isla diversas campa?as previas en los medios, centros de trabajo y estudio y organizaciones de masa con acciones educativas, preventivas y de detección temprana mediante pruebas de laboratorio.
Las acciones de la nación antillana contra el Sida no se limitan a esta efeméride, sino que se realizan de forma permanente a lo largo del a?o, e incluyen consejería preventiva, debates, así como conferencias y conversatorios a cargo de especialistas de salud y de personas contagiadas, conscientes de que esta labor ayuda a ampliar la percepción de riesgo.
Esto ha propiciado una situación estable en cuanto a contagios, y avances en la atención médica de los casos detectados, de los cuales, según directivos de salud, más del 80 por ciento de los afectados son hombres que en su mayoría tienen sexo con otros varones, aunque han aumentado ligeramente los casos de mujeres.
Desde que se detectó el primer cubano con VIH /Sida, en 1985, las autoridades locales de salud han brindado a cada infectado que se detecta, sin distinción alguna, el máximo posible de una atención médica (gratuita), que, sin reparar en gastos, trata de preservar a las personas, o al menos prolongarles la existencia con la mayor calidad de vida posible.
Más de 27 mil casos seropositivos han sido diagnosticados en Cuba desde 1986 y hasta la fecha, y el 18 por ciento de ellos ha muerto; los demás viven con el VIH, informó en la noche de este viernes el Noticiero de Televisión de la isla, y precisó que la vía principal de contagio es la relación sexual desprotegida, sobre todo de hombres con hombres.
Bajo el lema "Todos cuentan. Terminemos con el Sida" se celebró esta vez la efeméride, como un llamado a la inclusión de cada individuo en la lucha contra esa mortal epidemia, que en la nación latinoamericana es combatida como una prioridad de salud.
La campa?a global para la prevención -auspiciada por la Organización Mundial de la Salud (OMS)- ha estado centrada este a?o en el acceso universal a los servicios de atención y a los medicamentos seguros, eficaces y de calidad, algo que no novedad para Cuba, donde se les brinda a los infectados atención especializada y terapia antirretroviral para la no transmisión.
A pesar de las carencias impuestas por el bloqueo estadounidense, la ínsula garantiza costosos medicamentos para estos pacientes, de conformidad con los servicios de salud gratuitos y universales inherentes a la Revolución de 1959, como lo son también la educación inclusiva y el empleo para todos.
Como logro significativo en esta batalla de salud, en la que Cuba cuenta, la ínsula fue declarada hace dos a?os el primer país en eliminar la transmisión del VIH de madre a hijo y la sífilis congénita, y sigue trabajando en la prevención y detección temprana del VIH/Sida, que a nivel mundial afecta a 36,7 millones de personas, de acuerdo con cifras de la OMS.
Uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, impulsado por la entidad de Naciones Unidas para el Sida (Onusida), es poner fin a esa epidemia para 2030, pero para ello todas las personas deben tener acceso a la educación sanitaria, la información necesaria, y sus derechos de salud garantizados.
Además del trabajo de los gobiernos e instituciones, la lucha contra el Sida es responsabilidad tanto de sanos como de infectados: los primeros en pos de protegerse a sí mismos, así como a su pareja y descendientes, y los seropositivos o enfermos, para cuidar de no contagiar a otros. Solo así podrá ganarse, aunque a largo plazo, esa batalla.