RIO DE JANEIRO, 21 feb (Xinhua) -- El gobierno brasile?o presentó hoy un nuevo sistema para detectar la deforestación de la selva amazónica y auxilar en la preservación de la vegetación.
Se trata del Sistema Integrado de Alerta de Desforestación (SIPAM), desarrollado por un órgano subordinado al Ministerio de Defensa que utiliza imágenes de alta definición obtenidas vía satélite.
El sistema forma parte del proyecto Amazonia SAR, el cual busca mejorar el sistema de control de la pérdida de selva amazónica, con capacidad de detectar, incluso en la fase inicial, la deforestación, incluso entre octubre y abril, periodo en el que suele haber muchas nubes y lluvias en la región que dificultan la observación por satélite.
Los datos obtenidos se complementan con los del Instituto Nacional de Pesquisas Especiales (INPE).
Hasta el momento, el control de la desforestación se realizaba mediante imágenes obtenidas por cámaras acopladas en un avión que sobrevolaba la selva amazónica.
El ministro brasile?o de Defensa, Raúl Jungmann, aseguró en la presentación que el SIPAM supone una "revolución" en la lucha contra la deforestación de la Amazonia.
"Esta herramienta, que ya está funcionando desde octubre, permitirá una auténtica revolución en la defensa de la naturaleza y de la Amazonia. Tenemos la capacidad en tiempo real, durante todos los meses del a?o, de detectar cualquier deforestación que ocurra, con precisión", explicó el ministro.
"Anteriormente, solamente se tenía la capacidad de captar imágenes y la degradación, la actuación de las mineras y de las extractoras de madera durante cinco meses al a?o", dijo el ministro, al subrayar que se pueden tener informaciones en tiempo real de otros crímenes, como la minería clandestina y el tráfico de drogas y armas.
La deforestación de la región amazónica brasile?a aumentó un 29 por ciento en los últimos 12 meses hasta noviembre pasado, según datos del INPE.
Desde agosto de 2015 hasta noviembre pasado se perdieron 7.989 kilómetros cuadrados de la cubierta forestal por tala, con lo cual se superó por primera vez desde 2010 la marca de 7.000 kilómetros cuadrados para ese periodo.