MOSCU, 26 nov (Xinhua) -- Rusia cree que el plan de Estados Unidos de retirarse del Tratado sobre Fuerzas Nucleares de Alcance Intermedio (INF, por sus siglas en inglés) tendrá graves consecuencias para el mundo, dijo hoy el viceministro ruso de Relaciones Exteriores Sergei Ryabkov.
"Estamos profundamente convencidos de que... la destrucción de uno de los mecanismos clave de control de armas será radicalmente contraproducente", dijo Ryabkov en conferencia de prensa y agregó que Rusia sigue lista para dialogar con Estados Unidos.
"La crisis de confianza superará todos los límites y complicará aún más las perspectivas de lanzamiento de cualquier conversación sistemática sobre prevención de problemas estratégicos y de la carrera armamentista, lo que correspondería a los intereses de Rusia, Estados Unidos y la comunidad mundial en general", afirmó.
En octubre, el presidente estadounidense, Donald Trump, dijo que Washington se retiraría del histórico Tratado INF, firmado por la ex Unión Soviética y Estados Unidos en 1987, por la supuesta violación de Rusia al acuerdo, lo que ha sido rechazado en repetidas ocasiones por Moscú.
La destrucción del INF podría provocar un desmantelamiento acelerado de toda la arquitectura de control de armas y de la no proliferación de armas de destrucción masiva.
Mucho dependerá de los próximos pasos de Washington, dijo el vicecanciller.
Rusia está esperando una respuesta de Estados Unidos en la próxima reunión cumbre entre los presidentes de los dos países al margen de la cumbre del Grupo de los 20 (G20) en Argentina, agregó.
"En lo que respecta a la cumbre, creo que sería muy importante entender y de alguna forma aclarar o recibir una respuesta esencialmente a la pregunta principal de "?qué va a hacer después Estados Unidos?", indicó.
Ryabkov dijo que Rusia no puede ignorar el potencial despliegue de los nuevos misiles estadounidenses en territorios que representen una amenaza para Rusia y sus aliados.
Pero si Washington acuerda el diálogo constructivo y concreto, Moscú no tendría que ser persuadido, dijo Ryabkov.
Aunque Rusia cree que el tratado INF no es el ideal, aún tiene valor, y Rusia está lista para trabajar por su supervivencia, indicó.