PYONGYANG, 13 nov (Xinhua) -- La República Popular Democrática de Corea (RPDC) criticó hoy a Japón por su acción más reciente para evadir su responsabilidad por los crímenes de las "mujeres de confort" cometidos por el Ejército Imperial de Japón durante la Segunda Guerra Mundial (IIGM).
El Comité de Naciones Unidas para la Abolición de la Discriminación Racial publicó recientemente la respuesta del gobierno japonés a las recomendaciones de la agencia para resolver integralmente el asunto de las "mujeres de confort", incluyendo las reparaciones apropiadas.
En su respuesta, el gobierno japonés se?aló que "el asunto ya fue resuelto con base en el Tratado de Paz de San Francisco", y a?adió que es "difícil hacer una verificación detallada a partir de ahora", por lo que el gobierno es incapaz de hacer que los responsable rindan cuentas.
En referencia a la negativa de Tokio a reconocer su crimen de reclutamiento forzado de "mujeres de confort" durante la IIGM, el diario oficial de la RPDC, "Rodong Sinmun", se?aló en un artículo que los crímenes de Japón relacionados con la esclavitud sexual son espantosos crímenes contra la humanidad y nunca pueden ser perdonados.
Además, subrayó que el Tratado de Paz de San Francisco es ilegal y es ilógico que Japón alegue haber resuelto el asunto de la reparación bajo el pretexto del tratado.
Japón y Estados Unidos firmaron el Tratado de Paz de San Francisco en 1951 para terminar formalmente la guerra entre los dos países. Sin embargo, el tratado fue rechazado por China y por la RPDC, las dos mayores naciones víctimas de la guerra de agresión y de la ocupación japonesa.
"Los crímenes relacionados con la esclavitud sexual que Japón cometió en el pasado son horribles crímenes contra la humanidad y nunca pueden ser perdonados, por lo tanto, el asunto tiene que ser analizado con toda claridad y los responsables deben ser presentados ante la ley", se?ala el artículo.
El objetivo que persigue Japón no sólo es evadir la vergüenza como Estado criminal de guerra. "Su objetivo real es retornar a la era imperial y lograr la ambición de dominación sobre Asia que no consiguió en el pasado", indica el texto.
Los historiadores creen que unas 200.000 mujeres, en su mayoría de la península coreana, de China y de naciones del sudeste de Asia, fueron forzadas como a la esclavitud sexual por los soldados japoneses durante la devastadora guerra. Sin embargo, quienes niegan la historia en Japón las denigran y las llaman "prostitutas pagadas" o "voluntarias".