BUENOS AIRES, 4 dic (Xinhua) -- El ex futbolista Juan Román Riquelme estimó que el superclásico que se disputará en Madrid entre River Plate y Boca Juniors, por la final de la Copa Libertadores de América, "va a ser más parejo" que si se hubiese jugado en el Monumental.
"Ahora el partido es más parejo. En los superclásicos el local siempre tiene ventaja. Ahora se va a jugar en otro país", se resignó el oro olímpico en Beijing 2008 con el seleccionado argentino.
La final se llevará a cabo este domingo en el Santiago Bernabeu, por decisión de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), luego del ataque a pedradas contra el ómnibus que trasladaba al plantel de Boca, el sábado 24 de noviembre en cercanías del Monumental.
River no sólo perdió la localía, sino que al desquite podrán concurrir aficionados de Boca, cuando en la ida (igualaron 2-2 en La Bombonera) solo pudieron asistir los simpatizantes "xeneizes".
En declaraciones formuladas a radio Mitre el lunes a la noche, Riquelme sostuvo que "el superclásico es diferente a todo, puede ganar el que no viene bien", y "hay mucho nervio, es un partido distinto".
"Es lamentable que un equipo no pueda llegar a un estadio. Era nuestra final, en nuestro país, la teníamos que disfrutar y ver que la llevan a Europa... Creo que se perdió todo", se lamentó.
El ídolo de Boca, de 40 a?os, deseó que su equipo gane la séptima Copa Libertadores de su historia, aunque destacó que "la final se está jugando sólo porque uno tiene que ir al Mundial de Clubes, otro sentido no se tiene".
"La final de la Libertadores ya no es lo mismo, por más que el domingo voy a querer que gane Boca. Se tiene que jugar en nuestro país, nos quitaron la final, se juega en otro país. Va a ser el amistoso más caro de la historia", dijo.
El Mundial de Clubes de la FIFA se disputará en Emiratos Arabes Unidos a mediados de este mes con los campeones de las competencias de cada continente, entre ellos Real Madrid.