Roma, 21/06/2019 (El Pueblo en Línea) - Los sampietrini son un símbolo de la identidad de Roma desde hace siglos, pero ahora desaparecerán de algunas de las mayores calles de la capital italiana. La contestada alcaldesa Virginia Raggi, del Movimiento 5 Estrellas, ha anunciado recientemente el proyecto de su administración para retirar los célebres adoquines que embellecen gran parte de Roma en las calles con más tráfico y sustituirlos por asfalto, según La Vanguardia.
El Ayuntamiento lo ha bautizado como el “plan sampietrini”, un esfuerzo municipal para trasladar los adoquines de casi 70 grandes calles, donde sufren del peso de los miles de coches y viejos autobuses que circulan a diario, a otras más peque?as donde sólo los pisarán los peatones.
Los sampietrini –que reciben este nombre porque se colocaron por primera vez en la plaza de San Pedro– son adoquines cuadrados que nacieron bajo el pontificado de Sixto V en el siglo XVI. Al principio representaron una revolución para mejorar el tráfico de carruajes.
El problema que ve su administración es que la manutención de los sampietrini es mucho más cara que la del asfalto normal, unos 212 euros por metro cuadrado, y el Ayuntamiento de Roma, con una deuda monumental estimada en unos 12.000 millones de euros, no puede hacerse cargo. Fuentes del Campidoglio razonan que mantener los sampie?trini cuesta tres veces más que el asfalto común, por lo que era necesario pensar en una solución más práctica para arterias con mucho ?tráfico como Via Nazionale. Los adoquines sobrantes irán a otras 113 calles, sobre todo en el centro histórico, como Via Condotti, a los pies de piazza Spagna, o Via del Corso, la calle más co-mercial, que quieren que sea peatonal.