GINEBRA, 7 nov (Xinhua) -- La seguridad y protección de cientos de miles de civiles afectados por la reciente escalada de hostilidades en el noreste de Siria siguen siendo una grave preocupación, dijo hoy una importante funcionaria de la ONU.
Najat Rochdi, importante asesora humanitaria del enviado especial de la ONU para Siria, indicó esta noche en un boletín en Ginebra que aunque la intensidad y alcance de la violencia han disminuido en las últimas semanas, continúan los fuertes enfrentamientos de forma localizada.
Desde el 9 de octubre, dijo Rochdi, la ONU ha recibido informes de decenas de civiles muertos, así como de un creciente número de víctimas, a menudo causadas por artefactos explosivos improvisados.
"Las instalaciones de salud están rebasadas porque actualmente sólo dos de los 16 hospitales públicos funcionan a toda capacidad en esta zona", dijo.
De las más de 200.000 personas que han huido de los enfrentamientos en las últimas semanas, cerca de 100.000 no han podido regresar a casa y están dispersas en campamentos improvisados y refugios colectivos.
"Estos desplazamientos recientes están complicando una situación ya difícil. Ya hay alrededor de 710.000 desplazados y cerca de 1,8 millones de personas necesitan ayuda humanitaria", a?adió.
Rochdi dijo que los actores humanitarios siguen movilizándose y ayudan a las personas afectadas por las hostilidades en donde todavía es posible el acceso y exhortó a todas las partes a hacer más para facilitar un acceso garantizado seguro, sostenido y sin obstáculos para la ONU y sus socios humanitarios.