BEIJING, 2 jun (Xinhua) -- La acusación del gobierno de Estados Unidos respecto a que China da marcha atrás en consultas comerciales es totalmente infundada, según un libro blanco emitido hoy domingo por la Oficina de Información del Consejo de Estado de China.
El libro blanco, titulado "Posición de China sobre Consultas Económicas y Comerciales entre China y EEUU", se?ala que es una práctica común que ambas partes realicen nuevas propuestas de ajustes al texto y al lenguaje de las consultas en curso.
En más de diez rondas anteriores de negociaciones, la administración estadounidense cambió sus demandas. Resulta imprudente acusar a China de "dar marcha atrás" mientras las conversaciones todavía están en curso.
La experiencia histórica demuestra que cualquier intento de forzar un acuerdo a través de tácticas como la calumnia, socavar a la contraparte y ejercer presión extrema, termina por arruinar la relación de cooperación. Se perderán oportunidades históricas.
Un país civilizado solo recurre a medidas enérgicas cuando han fracasado los enfoques más suaves. Después de que Estados Unidos emitiera la nueva amenaza arancelaria, la comunidad internacional se preocupó por la posibilidad de que China pudiera cancelar su visita de consulta a los Estados Unidos y mantuvo una estrecha vigilancia sobre la futura dirección de las negociaciones comerciales China-EEUU, destaca el libro blanco.
Teniendo en cuenta los intereses más amplios de las relaciones comerciales y económicas entre los dos países, China mantuvo la cabeza fría, ejerció moderación y envió una delegación de alto nivel a los Estados Unidos, según lo acordado para la 11a ronda de consultas económicas y comerciales del 9 al 10 de mayo.
Al hacerlo, China demostró gran sinceridad y un fuerte sentido de responsabilidad para resolver las controversias comerciales mediante el diálogo. En los consiguientes debates cándidos y constructivos, ambas partes acordaron manejar sus diferencias y mantener las consultas.
China expresó su firme oposición al aumento arancelario unilateral por parte de Estados Unidos y manifestó su firme postura respecto a adoptar las contramedidas necesarias, a?adió el texto.
China recalcó una vez más que los acuerdos comerciales deben basarse en la igualdad y en el beneficio mutuo. China nunca cederá en sus principios fundamentales relativos a sus intereses esenciales, de acuerdo con el libro blanco.
"Un requisito previo para un acuerdo comercial es que Estados Unidos debe eliminar todos los aranceles adicionales impuestos a las exportaciones chinas, mientras la compra de productos estadounidenses por parte de China debe ser realista, al tiempo que se garantiza un equilibrio adecuado en el texto del acuerdo que sirva a los intereses comunes de ambas partes", indicó el documento.